Que generará el despido de la mayoría, que la clase media no aguanta cargar con más gastos, que no se puede tener un privilegio sobre la negación de los derechos de otros, que los salarios que reciben son muy bajos, que son esclavizadas, que son parte de la familia…, en fin, son muchos y variados los comentarios que desde distintos sectores sociales se han emitido respecto a la propuesta del Ministerio de Trabajo para regularizar el trabajo doméstico en República Dominicana.
La propuesta, con fines de discusión en vistas pública, la presentaron el pasado 29 de marzo, un día antes de la fecha (30 de abril) en que desde 1988 se celebra el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, con el fin de “promover el valor del trabajo del hogar y convocar acciones para reivindicar los derechos de quienes lo realizan, en su mayoría mujeres”.
Aunque se trata de poner en vigencia las mejoras aceptadas por el país cuando en 2015 ratificó la Convención 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), para muchas personas es una novedad que les entraña muchas dudas y preocupaciones.
Las redes sociales han sido escenario donde muchos han externado públicamente las opiniones que entre amigos y familiares han venido discutiendo.
La propuesta del ministerio implica contratos de trabajo firmado, sueldo mínimo e inclusión de los trabajadores domésticos en la seguridad social.