El problema es conocido por todos. Vas a un sitio nuevo, o no (que también hay gente que se pierde en sus propias ciudades), aparcas el coche donde puedes y te vas a recorrer el lugar. Al final de la visita, si te has movido mucho o tu orientación no está afinada, llega la duda, ¿dónde está el coche?
Aquellos que sean de personalidad previsora suelen tirar del truco de mandarse a sí mismos por WhatsApp la ubicación. Es una solución socorrida, pero no es la única. Especialmente cuando se descubre que desde hace tiempo Google Maps, esa aplicación que se usa para moverte por una ciudad desconocida sin preguntar a nadie, ofrece la posibilidad de guardar la localización del coche y luego conducirte hasta él como si fuera otro punto de interés en el recorrido. Además, si la ubicación enviada por WhatsApp por lo general se abre en el Maps, ¿por qué no ir directamente a la fuente?
Eso sí, los desarrolladores del Maps, o sus diseñadores, no estuvieron muy acertados a la hora de colocar esta función ya que se encuentra un tanto escondida en la aplicación. Se puede excusar la situación afirmando que la interfaz tiene tantas cosas, tantas funciones, que no todas pueden estar en primera línea y hay que elegir. Pero colocarla al lado de la función Calibrar la brújula no parece lo más idóneo para una función tan práctica.
Lo primero es abrir Google Maps y encontrarse a uno mismo, en este caso el sitio donde aparcamos el coche. Esta parte es fácil porque aparecemos marcados con un punto azul, que, incluso, señala la dirección hacia la que está orientado el móvil. Ahora empieza el trabajo. Pinchando en el punto azul se despliega desde la parte inferior de la pantalla una pestaña que lleva por nombre Tu ubicación. En ella aparece la dirección del lugar en el que te encuentras y debajo una linea con serie de botones que hay que desplazar lateralmente hacia la izquierda para encontrar el que se busca. El primero de ellos es Compartir Ubicación, el siguiente Calibrar y el tercero, por fin, Guardar aparcamiento. Aún quedan dos más, Notificar un problema y Añadir un sitio.
Clicando sobre Guardar aparcamiento la ubicación queda almacenada en el mapa y es señalado con una marca roja y la leyenda “Has aparcado aquí”. Además, se despliega una nueva pestaña en la parte inferior en la que, entre otros datos, se puede apuntar la hora en la que acaba el tiempo del parquímetro. También se puede compartir la ubicación. Además, ofrece la posibilida de borrar voluntariamente esta ubicación.
Para volver, basta con abrir el Google Maps y pinchar encima de la señal. En la parte inferior aparecerá un botón llamado Cómo llegar que muestra el camino hasta el coche.
Una función útil y sencilla si se consigue encontrar.
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