El papa Francisco imploró hoy el fin de las guerras en el mundo, en concreto en Ucrania, y la reconciliación de «los corazones llenos de violencia y venganza», durante el rezo del rosario en la basílica romana de Santa María la Mayor al que asistió de nuevo en silla de ruedas por sus problemas de rodilla.
«Esta tarde, al término del mes consagrado a ti, estamos de nuevo aquí ante ti, reina de la paz, para suplicarte que concedas el gran don de la paz, que cese pronto la guerra que ya desde hace decenios enfurece varias partes del mundo y que ahora ha invadido también el continente europeo», pidió el papa en la apertura del acto.