Fue encontrado en la República Dominicana el cuerpo sin vida de uno de los fugitivos más buscados de Nueva Jersey por secuestro y ejecución de un hombre en Queens, Nueva York el 12 de diciembre de 1997, según informaron medios internacionales.
Anthony Mota murió en su hogar en Nizao, al Sur de República Dominicana, donde se había refugiado luego de escapar de las autoridades estadounidenses.
Para lograr mantenerse de incógnito el dominicano cambió de nombre y se hizo llamar Miguel Ángel González Pérez, alias bajo el cual murió de un infarto en abril del año 2021 cuando las agencias de investigaciones norteamericanas ya sospechaban de quien se trataba.
Anthony Mota secuestró a la víctima, luego lo ató y lo torturó con otros durante días hasta que obtuvieron un rescate de $23,000 de la familia de la víctima, el Alguacil de los Estados Unidos para el Distrito de Nueva Jersey, Juan Mattos, Jr., y dijo el superintendente del NJSP, coronel Patrick J. Callahan.
Poco después, Mota llevó a la víctima a un área a lo largo de la Interestatal 280 en Harrison y le disparó en la cabeza y el cuello, matándolo. Mota luego colocó el cuerpo de la víctima en otro automóvil que se incendió.
En 2021, los detectives de la policía estatal de Nueva Jersey y los alguaciles estadounidenses adjuntos asignados a NY/NJ RFTF, junto con los alguaciles estadounidenses adjuntos asignados a la Oficina de Relaciones Exteriores de la República Dominicana de los alguaciles estadounidenses, desarrollaron información de que Mota pudo haber estado viviendo en Nizao, República Dominicana.
El 3 de junio de 2022, la Oficina de Ciencias Forenses de la Policía Estatal de Nueva Jersey recibió las comparaciones de resultados del ADN. Estos resultados confirmaron lo que los detectives de la Policía Estatal de Nueva Jersey habían creído, “Miguel Ángel González Pérez” era, de hecho, el fugitivo más buscado de Nueva Jersey, Anthony Mota, lo que significa el cierre del caso de un cuarto de siglo de antigüedad.
Fuente: noticias SIN