Los hogares de clase media y baja están con “el grito al cielo” debido al incremento, por cuarta ocasión en este año, de la tarifa eléctrica, más la suma del encarecimiento de los servicios y alimentos, lo que provoca malestar, informó el Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE).
El pastor Feliciano Lacen Custodio sostuvo que la población dominicana atraviesa como en toda la región, una situación económica difícil debido a la persistencia de la presión inflacionaria y reducción de ingresos económicos en las familias.
El CODUE, considera que la situación pone a pensar a muchas familias al momento de adquirir o comprar bienes y servicios; por lo que el gobierno, los agentes económicos deben buscar soluciones a corto y mediano plazo para contrarrestar la crisis de incertidumbre, el malestar colectivo y evitar el aumento de los niveles de pobreza.
El reverendo Feliciano Lacen, dijo que el discurso oficial sobre estabilidad de precios y mejoría del empleo no concuerda con la realidad social ni con el descalabro económico que sufren los dominicanos, por lo que hizo un llamado a las autoridades gubernamentales a dar respuesta ante la actual situación.
“Se le recomienda al Estado Dominicano y a su equipo económico estudiar la posibilidad de congelar los precios de los productos básicos de la canasta familiar por un periodo de tiempo razonable y seguir incentivando con más eficiencia la siembra local y el apoyo a nuestros campesinos, para que la República Dominicana sea cada día más autosustentable y que pueda mejor exportar de su producción local. Contemplar la mejora de los caminos vecinales y carreteras para poder comercializar con más eficiencia la producción.”
