La secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA) aseguró ayer que los últimos 20 años de presencia de la comunidad internacional en Haití significan “uno de los fracasos más fuertes y manifiestos”, que se haya implementado y ejecutado “en ningún marco de cooperación internacional”.
En medio de este panorama crítico, el ente hemisférico dejó claro que tal situación “no tiene que ver con las personas que con vocación de servicio y afán altruista sirvieron como cooperantes y dejaron sus máximos esfuerzos, y hasta en algunos casos su vida, por Haití”.
“Esto tiene que ver con que en 20 años de estrategia política errada la comunidad internacional no fue capaz de facilitar la construcción de una sola institución con capacidad de responder a los problemas de los haitianos, 20 años después ni una sola institución es más fuerte de lo que lo era antes”, subrayó la OEA, en un extenso comunicado.
Bajo ese paraguas de la comunidad internacional, remarca, “fermentaron y germinaron las bandas criminales que hoy asedian al país y a su pueblo, bajo ese paraguas germinó y se gestó el proceso de desinstitucionalización y de crisis política que hoy vivimos”.
Entonces, agrega, visto su fracaso, “la comunidad internacional se retiró de Haití dejando tras de sí caos, destrucción, violencia”.
A renglón seguido, la OEA juzga “absurdo” pretender que bajo ese esquema de destrucción los haitianos completamente solos, polarizados y con muy menguados recursos puedan reconstruir o construir un proyecto de seguridad, reinstitucionalización y desarrollo que les permita a 12 millones de habitantes recomponer la coexistencia pacífica”.