El 11 de julio, una erupción solar captó la atención de los observatorios espaciales en distintos puntos del planeta. En las últimas semanas, la superficie solar ha tenido una actividad particular, con grandes explosiones o erupciones solares que muchas veces llegan a la Tierra con consecuencias poco gratas para satélites y aparatos electrónicos.
Las erupciones solares son un poco como el fogonazo de un cañón, según la NASA: un estallido de luz que llega a la Tierra en cuestión de minutos y también transporta partículas de alta energía que interactúan con nuestra atmósfera. Esta repentina explosión de radiación electromagnética y partículas de energía es originada en una pequeña región de la atmósfera solar. En este caso provenía de una región del Sol donde su campo magnético es especialmente fuerte y complejo, lo que provocó que estas explosiones viajen a la velocidad de la luz.
Sin embargo, estos fenómenos no siempre ocurren de manera espontánea, sino que son el resultado de un proceso mucho mayor como el que está experimentando el Sol en este momento. El lanzamiento de enormes cantidades de plasma solar al espacio es un proceso conocido como eyección de masa coronal (CME, por sus siglas en ingles), que se desplaza a una velocidad menor que las eyecciones y eso es precisamente lo que sucedió toda la semana pasada. Fue el 15 de julio cuando una de ellas se proyectó desde el Sol hacia la Tierra y, a pesar de su menor velocidad, las previsiones delCentro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA (Space Weather Prediction Center, en inglés) indican que llegará a la Tierra este jueves 21 de julio.
Tamitha Skov, conocida como la “Mujer del Clima Espacial”, es una científica investigadora de la Corporación Aeroespacial -organismo financiado por EEUU- y es una galardonada educadora científica en las redes sociales. El último sábado publicó un video del modelo de predicción de la NASA y escribió: “¡Golpe directo! Un filamento en forma de serpiente lanzado como una gran tormenta solar mientras está en la zona de impacto de la Tierra”.