Con el paso de los años importantes activos históricos y culturales, utilizados y adorados por pasados presidentes dominicanos, han desaparecido o han sido marginados.
Para solo citar tres casos muy conocidos, están los gigantescos gansos que adornaban los jardines del Palacio Nacional y cautivaban la mirada de quienes visitaban la mansión presidencial o caminaban por sus alrededores. También están las villas de veraneo de los jefes de Estado en Sans Soucí y Juan Dolio.
Sobre aquellos hermosos gansos, con plumas multicolores, su calvario comenzó cuando en la segunda gestión del presidente Leonel Fernández (2004-2008) se inició la construcción de un helipuerto en la explanada frontal del Palacio Nacional para uso exclusivo del helicóptero presidencial, como actualmente es utilizado.
Uno de los responsables de esa obra, el arquitecto dominicano Tobías Lockhart, advirtió en una visita de inspección que las luces de aproximación del aeródromo, siempre amanecían destruidas o despegadas, lo que motivo que hasta se montara un operativo de inteligencia.
Al cabo de unos días, al caer la tarde y cuando los gansos se movilizaban al área de la capilla del Palacio, se pudo ver algunos de ellos dando picotazos sobre los faroles hasta romperlos o dañarlos, y ahí comenzó su calvario.
Desaparecieron como espuma y solo se comenta que aún existen y “están por ahí”. Una vez se dijo que fueron trasladados a la casa presidencial de Juan Dolio, pero eso nunca se pudo confirmar.
Las casas de veraneo
Las casas de veraneo o casas presidenciales de Juan Dolio y Sans Soucí también tienen su historia.
La más visitada de ellas, la de Juan Dolio, rodeada de pequeñas villas y hoteles, próximo a orillas del mar Caribe, en una exclusiva zona de Juan Dolio, estuvo a la disposición del mandatario de turno y su familia, pero a partir de la llegada de Salvador Jorge Blanco (1982-1986) su uso no fue frecuente y muy escasamente la visitó.
Jacobo Majluta (julio 1986-agosto 1986) no la visitó nunca, pero se dice que fue quien le construyó una cancha de tenis.
El presidente Hipólito Mejía la utilizaba con mucha frecuencia. Incluso le hizo importantes remodelaciones y la dotó de variedades de árboles y aves exóticos que compraba o le regalaban en varios países visitados durante su mandato (2000-2004), especialmente Asia, Marruecos, Israel y Suramérica.
El expresidente Medina no utilizó la casa de Juan Dolio durante su primer mandato, pero en su segundo período de Gobierno, específicamente en diciembre, se reunió allí con miembros de su gabinete para las festividades de fin de año.
Fernández y su familia utilizaron la villa en varias ocasiones, además de recibir la visita de los entonces presidentes de Colombia, Álvaro Uribe; de Venezuela, el fenecido Hugo Chávez, y de Honduras, Manuel Zelaya; también recibía amigos y funcionarios de su Gobierno.
Esta casa no es suntuosa. Su gran activo es que está frente a la playa, con su piscina y un gazebo.
Sans Soucí
Esta mansión, ubicada en este polo turístico, a orillas del mar Caribe, está enclavada en una extensión de terreno de 4,500 metros cuadrados, con lujosas habitaciones, terrazas, jardines y acceso a la playa.