En lo que va de año, la violencia machista ha enlutado a unas 23 familias en República Dominicana. Estos crímenes cometidos por el hombre en contra de su pareja se han extendido en lo que los sociólogos llaman feminicidio ampliado cuando otros miembros de la familia también se convierten en víctimas.
Trágicas escenas que se repiten en hogares ubicados en diferentes localidades del país: hombres que matan y luego se suicidan, los que cometen el horrible crimen delante de sus hijos y los que descargan sus armas contra los familiares de su cónyuge.
Justo este martes, Rosmery Ulerio, de 27 años, fue ultimada frente a sus hijos por su expareja, un hombre identificado como Víctor Cuevas, quien también hirió al novio de la víctima y se quitó la vida tras cometer el crimen, en un hecho ocurrido en el sector Villas Agrícolas.
