Según un informe divulgado el martes por la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, al menos 22 defensores de los derechos humanos han sido asesinados durante este año en Colombia, y al menos 562 han perdido la vida, entre entre 2016 y 2021.
La Oficina indicó, no obstante, que recibió información sobre 114 homicidios de defensores y defensoras en 2002, pero solo 22 han sido verificados hasta ahora.
A pesar de que que en 2016 se firmó un acuerdo de paz entre el Gobierno del expresidente Juan Manuel Santos y la extinta guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC); aún existen grupos armados que delinquen como las disidencias de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional ELN y el Clan del Golfo.
«La creciente violencia perpetrada por los grupos armados y las organizaciones criminales en las zonas rurales de Colombia está teniendo un impacto devastador; especialmente entre las mujeres, los niños, los afrodescendientes, los líderes comunitarios, los pueblos indígenas y los defensores de los derechos humanos», indica el informe.