Miles de personas se congregaron el sábado en el complejo de monumentos National Mall en la capital estadounidense y otras ciudades para demandar leyes estrictas para el control de las armas de fuego, luego de recientes tiroteos —como los de Uvalde, en Texas, y Buffalo, en Nueva York—, algo que los activistas dijeron que deben llevar al Congreso a actuar.
“Ya basta”, dijo la alcaldesa del Distrito de Columbia Muriel Bowser en la segunda Marcha por Nuestras Vidas en la ciudad de Washington. “Les hablo como alcaldesa, como madre y las hablo por millones de estadounidenses y alcaldes en Estados Unidos que demandan que el Congreso haga su trabajo. Y su trabajo es protegernos, proteger a nuestros niños, de la violencia con armas de fuego”.
En Washington, D.C., orador tras orador exigieron a los senadores —que son considerados el mayor obstáculo para una legislación— a que actúen ahora o enfrenten la posibilidad de ser derrotados en las elecciones, especialmente dado el shock en la nación luego de que 19 niños y dos maestras fueran asesinados el 24 de mayo en la escuela primaria Robb, en Uvalde.